Pablo y patxi, en diario de navarra

Hoy en diario de navarra, nos encontramos con esta bonita entrevista, de dos cracks que tienen bastante relacion con el Egues:

Pablo, del que poco mas podemos decir, y patxi, exjugador del club, hablan del partido del domingo y de paso sale nuestro club por ahi.

Pablo Orbaiz (Elcano, 1979) es desde esta temporada el primer capitán del Athletic, tras la retirada de Etxeberria. San Mamés siente domingo tras domingo sus dotes de mando en el campo y en el vestuario. Organizador práctico y con un desarrollado sentido táctico, al igual que Puñal, sigue siendo osasunista de corazón.

¿En qué lugar figura Osasuna en su sentimiento?

Jugué de los 6 años hasta los 20. Aparte del fútbol, he convivido mucho, he recibido muchos consejos. Osasuna siempre será especial, por encima del propio fútbol o deporte.

¿Le vienen recuerdos emotivos cuando sale a jugar al Reyno?

Personalmente, hay dos momentos que no se olvidarán nunca. El día del ascenso (2000) y el de la permanencia en Segunda (1997). Pero al final, cuando estás en el campo y el balón está en juego, lógicamente tienes que defender lo tuyo al máximo.

¿En qué ha cambiado Pablo Orbaiz de aquel chaval de 18 años que debutó con el primer equipo rojillo?

Tengo 14 años más... (sonríe) Uno va creciendo y va cogiendo experiencia en todo. Tampoco he cambiado mucho. Sigo teniendo los mismos amigos y sigo siendo el mismo.

Comenzó con un tal Patxi Puñal. ¿Cuál es su opinión sobre él?

A Patxi le conozco desde hace muchísimos años. Le he visto jugar muchos partidos. Por supuesto, ha sido un referente para mí. Su juego me ha encajado mucho.

Ahí aguanta con 35 años. Y titular.

Porque es muy bueno. Él se lo gana con su trabajo, con su sufrimiento. Al final, tiene lo que se merece: estar muchísimos años en la elite.

¿Qué es ser capitán del Athletic?

Un premio a muchos años. El Athletic representa mucho aquí. El poder ser capitán es un privilegio.

Usted ha cumplido 32 años.

Ojalá siga muchos más. Yo estoy con ganas y me encuentro muy bien. Al final, el fútbol te quita y te pone.

Con golazos como el que marcó al Almería...

Ojalá pueda repetir. Eso da muchos ánimos para seguir.

¿Es cierto que tiene previsto retirarse en el Egüés en un futuro?

El tiempo lo dirá (sonríe). Estoy centrado de momento en el Athletic.

¿Alguna vez ha existido la oportunidad de volver a Osasuna?

No había ninguna opción. Aquí he estado muy bien y en Pamplona me han tratado muy bien también.

¿Le duele que no se trate bien al Athletic en Pamplona?

He jugado muchos años en Osasuna y soy de allí. El ambiente contra el Athletic siempre es especial. Cada uno es libre de hacer lo que quiera. Yo intento hacer mi trabajo. Forma parte del fútbol. Cada uno defiende lo suyo. Tampoco le doy demasiada importancia.

¿Qué opina del Osasuna de Mendilibar?

Están fuertes. Han conseguido salir un abajo y coger fuerza. Se les ve con moral. Mendilibar tiene un carácter muy especial. Es una persona que siempre va de cara. Es un entrenador muy preparado .

¿Por qué no triunfó en Bilbao?

Los resultados no fueron bien. No conseguimos estar finos y el mundo del fútbol tiene estas cosas.

Puñal: "Pablo es el prototipo de jugador de club"

Patxi Puñal (Huarte, 1975) encarna los valores del futbolista navarro. Sigue siendo indiscutible su presencia en el once titular cada domingo, a la vez que acumula números que se quedarán grabados en la historia del club. No sólo se trata de un medio centro de contención, inteligente en lo táctico y luchador en actitud. Su honestidad como portador del brazalete le hace ser un referente para todos los chavales que aspiran alguna vez a llevar el escudo de Osasuna en el pecho. Así ve a Orbaiz.

¿Qué representa Pablo para usted?

Es el prototipo de jugador de club, comprometido con unas condiciones de liderazgo importantes. Es el jugador que siempre está, sobre todo en los momentos más complicados, cuando el Athletic ha estado ahí abajo. En estos momentos difíciles, Pablo era el que tiraba del carro. Detrás suya iban los demás. Todos esperaban mucho de Pablo y Pablo ha sido capaz de darlo.

¿Se ha fijado en él en los partidos como futbolista?

Sí, bastante. Los años que más me han gustado han sido esos más complicados del Athletic. El equipo no estaba acostumbrado a jugar por mantener la categoría. Se notaba esa situación de la tabla porque estaba atenazados. Pablo era el que tiraba de toda esa gente.

¿Se acuerda de cuando coincidieron en Osasuna?

Han pasado muchos años... Tengo bastantes recuerdos de él cuando yo jugaba en el Egüés en Tercera División. Su padre era (y es) el presidente. Pablo venía a los entrenamientos y hablábamos. Me decía cosas... Yo tenía 19 años y él 15. De los 15 a los 19 hay un paso importante. Él era un niño y yo, con 19, me creía ya que era un hombretón...

Luego coincidieron en Osasuna, en la etapa de Segunda.

Fuimos compañeros varias temporadas pero coincidimos bastante poco en el campo jugando juntos. Cuando llegó, Pablo jugaba y a mí me tocó esperar un tiempo en el banquillo.

¿Qué relación tiene con Orbaiz?

No es que tengamos un trato de llamarnos por teléfono y demás, pero yo tengo mucho aprecio por Pablo y sé que el afecto es mutuo. Nos veamos donde nos veamos, siempre hablamos amigablemente, haya la tensión que haya en el campo.

¿Se considera usted un futbolista parecido a Orbaiz en muchos aspectos?

Tenemos un perfil parecido. Yo creo que nos parecemos en la constancia, la tranquilidad, el saber estar en muchos momentos. Hay gente que en momentos difíciles no sabe darle, darle, darle, y esperar a que cambien las cosas. Hay quien se desespera antes de tiempo. Esa constancia, ese tesón y esa cabezonería de aquí, nosotros la tenemos.

¿Les queda mucha cuerda para sumar más partidos? Totalizan los dos 588 encuentros en Primera.

Los años van pasando... Veremos a ver. Desde luego, yo me encuentro bien para seguir jugando. Mientras siga así, no pienso en dejar el fútbol. Pablo tiene cuatro años menos que yo. No creo que tenga motivos para colgar las botas. Los dos seguiremos dando guerra y disfrutando.

Hace 14 años jugaron juntos por primera vez en Osasuna

La primera vez que coincidieron en un terreno de juego con la camiseta del primer equipo de Osasuna fue un 15 de junio de 1997. Era el último partido de una temporada agónica que terminó con final feliz. El equipo que dirigía Enrique Martín consiguió la gesta de salvar la categoría en Segunda gracias a un milagro en las últimas jornadas. Con el objetivo conseguido, Osasuna despidió la Liga en Ipurúa contra el Eibar.

Orbaiz, con 18 años, había debutado con Sola y se consolidó con Martín. Jugaba en el centro de la defensa en una demarcación más parecida al líbero de otras épocas. Puñal subió al primer equipo en la parte final del curso y se estrenó en este partido de Eibar con 8 minutos. Tenía 22 años. Era un futbolista que pocas temporadas antes se había ganado la vida trabajando a turnos en la fábrica y curtiéndose en los campos de Tercera. Puñal sustituyó aquella tarde de junio a Mateo en un encuentro en el que Martín alineó a 12 canteranos (todos salvo Bolo y De Freitas). También fue titular Josetxo, de medio centro junto a Nagore.

Ocho veces como rivales

Orbaiz y Puñal siguieron de compañeros las dos temporadas posteriores en Segunda. A mediados de la 99-00, sus caminos se separaron. Puñal hizo las maletas a Leganés y Orbaiz participó en primera persona en el ascenso. Desde entonces, han sido rivales.

Puñal acumula la espectacular cifra de 331 partidos en Primera, desde la 01-02. Su media de encuentros por año es de 35 y en éste no va a ser menos. Orbaiz juega en el Athletic desde la 00-01 y totaliza 257 partidos, 20 en ésta. Sólo las graves lesiones le han restado presencia. A los dos les queda cuerda. Este domingo se verán las caras por octava vez en el campo. Cuatro ha ganado Patxi y tres Pablo. En el Reyno se juntarán dos trayectorias ejemplares.